Diseño conceptual

Nuestra área de oportunidad son los caminos y senderos, que se encuentran a la entrada del edificio, entre la entrada exterior (reja) y la principal, comúnmente “el camino” que está en el ante jardín y en general todos los senderos que unan los distintos sectores del edificio, como los caminos al estacionamiento, los senderos en jardines, senderos a los costados de las piscinas, etc.

De esta forma podremos complementar, innovar y potenciar los productos que hoy ILKU vende; lo que no quita que podamos iluminar los mismos sectores de una forma distinta y con los procesos que posee la Mipe.

Para tal fin, nos planteamos ciertas características que debe cumplir nuestro producto, ya teniendo claro lo que queremos lograr con él: dar la bienvenida al hogar, creando un lapsus (un alto en el día, cuando el usuario llega a la casa luego de un día de trabajo, universidad), acogiendo al usuario mediante un efecto lumínico que lo haga sentirse en casa, sentirse acompañado, protegido e invitado a entrar a su casa.

Comenzaba la etapa de diseño conceptual. Ahora había que tirar líneas y definir forma. Aquí empezaba lo difícil. ¿Por qué? Porque no hay un usuario único que va a utilizar nuestro producto. Es tan variado el tipo de personas que vive en un edificio, no hay edad, sexo, gustos ni nada común para todos. Sólo sabemos que tienen un nivel de vida, y un perfil socio-económico similar. Como segundo aspecto, está el hecho de que estamos diseñando para Ilku, por lo que existe una cantidad enorme de limitaciones que coartan un poco la creatividad, pero que nos ayudan a mantener los pies en la tierra y enfocarnos en diseñar para un usuario y no para nosotros.

Así se convierte en un desafío el crear una luminaria que sea neutral en ese aspecto, que sea transversal. No podemos “volarnos” y crear formas complicadas o ultra vanguardistas que en verdad no se van a adecuar al espacio estudiado y no van a tener las características que buscamos del punto de vista del factor humano. Además, desde el enfoque de Ilku, serían imposibles de fabricar. Necesitamos formas simples, conocidas por todos, pero que sean innovadoras en su aplicación y en la creación de un ambiente envolvente que acoja al usuario mediante proyecciones e intensidades de luz.

Como surgió de nuestra segunda visita a la empresa, aprovecharemos los retazos de distintos acrílicos que quedan, generando áreas por donde la luz se proyecta de forma potente y otras por donde la luz se difumine bastante, generando distintas intensidades de luz que nos permitan manejar el recorrido que generaremos. Este recorrido lumínico irá uniendo las luminarias entre sí, dando continuidad y marcando el camino a seguir. Aquí unas imágenes con las 2 propuestas que consideramos con mayor potencial: